Pocas veces (o ninguna, mejor dicho) me pasó de ausentarme de los lugares que suelo frecuentar y que algún hecho sacudiera a los míos….
Pero, como para todo siempre hay una “primera vez” y así fue que mientras yo descansaba y trataba de desconectarme del mundo, que dicho sea de paso, me dejo “nalgas para arriba” en Diciembre del 2009 un tío mío decidió "irse de gira"; con el pequeño detalle de que a mi tío lo fueron a despedir al Congreso Nacional unas 50.000 personas y otras tantas en el recorrido desde el palacio legislativo hasta Burzaco.
A esta altura de mi relato no debe haber persona que este leyendo este post que no sepa que estoy hablando de Sandro (Y si no te diste cuenta, haceme el favor y deja de leer)
Me crié con la música del Gitano, y aprendí a ser fan gracias a mi madre, que no faltó ni una vez a sus recitales, incluso en aquellos recordados 25 años en el Luna Park (El famosos show en el que apareció en escena vestido como Elvis en su último show) en el cual no estuvo de cuerpo presente, pero sí siguiéndolo por la radio… por supuesto conmigo al lado, desde la mesada de la cocina de la calle Luján. Y como para sumar un detalle, durante muchos años amanecí con los ojos de Sandro mirándome desde un cuadro que mi mamá ganó cuando tenía dulces 16 añitos en un concurso radial. También recuerdo las mañanas de sábado en las que blem, y cif se mezlcaban con los hitazos de Robert.
Así fue como la imagen, la música y las películas de Roberto estuvieron siempre en mi casa, y es por eso que para mí no se fue un cantante, ni una figura pública, ni un personaje del show business local… se fue un tío, al que “Su” (Mi madre) adoraba, y hoy sigue llorando.
Desde que me entere de la noticia no pude dejar de cantar esta canción que les comparto de Sandro de América.
Tarde pero seguro, no podía dejar de recordarlo… Se fue un grande, una persona de bien y que además era mi tío adoptivo!
NaRa
Pero, como para todo siempre hay una “primera vez” y así fue que mientras yo descansaba y trataba de desconectarme del mundo, que dicho sea de paso, me dejo “nalgas para arriba” en Diciembre del 2009 un tío mío decidió "irse de gira"; con el pequeño detalle de que a mi tío lo fueron a despedir al Congreso Nacional unas 50.000 personas y otras tantas en el recorrido desde el palacio legislativo hasta Burzaco.
A esta altura de mi relato no debe haber persona que este leyendo este post que no sepa que estoy hablando de Sandro (Y si no te diste cuenta, haceme el favor y deja de leer)
Me crié con la música del Gitano, y aprendí a ser fan gracias a mi madre, que no faltó ni una vez a sus recitales, incluso en aquellos recordados 25 años en el Luna Park (El famosos show en el que apareció en escena vestido como Elvis en su último show) en el cual no estuvo de cuerpo presente, pero sí siguiéndolo por la radio… por supuesto conmigo al lado, desde la mesada de la cocina de la calle Luján. Y como para sumar un detalle, durante muchos años amanecí con los ojos de Sandro mirándome desde un cuadro que mi mamá ganó cuando tenía dulces 16 añitos en un concurso radial. También recuerdo las mañanas de sábado en las que blem, y cif se mezlcaban con los hitazos de Robert.
Así fue como la imagen, la música y las películas de Roberto estuvieron siempre en mi casa, y es por eso que para mí no se fue un cantante, ni una figura pública, ni un personaje del show business local… se fue un tío, al que “Su” (Mi madre) adoraba, y hoy sigue llorando.
Desde que me entere de la noticia no pude dejar de cantar esta canción que les comparto de Sandro de América.
Tarde pero seguro, no podía dejar de recordarlo… Se fue un grande, una persona de bien y que además era mi tío adoptivo!
Cada vez que suceden estas cosas, cosas que generalmente la gente no imagina, pienso que determinados famosos, aunque no los conozcamos, o aunque conozcamos una faceta de ellos nada más, realmente pasan a ser considerados seres queridos o personas de la familia. Nunca fui ferviente seguidora del Gipsy, si bien siempre me atrapó esa magia de ídolo popular, y el manejo que tenía con respecto a su posición en el mundo del espectáculo, a su fama, con sus nenas, y hasta con su salud, pero no pude evitar conmoverme con tal noticia. Soy bastante fría y tajante para aceptar determinados procesos y determinadas vueltas de la vida, sobretodo si tiene que ver con un fin, pero al ver las repetidísimas imágenes que se ven por doquier, del veinteañero que sacudía la pelvis, o del tío enfermo con el tubo de oxígeno, más cerca de tocar el arpa que de cantar Rosa Rosa, e me hace muy difícil elaborar un duelo (sí, la palabra es duelo). Es por eso que pienso que personas como Sandro, y muchos más que no viene al caso nombrar ahora, transgreden los límites de lo físico, están en la memoria popular, en el acervo cultural de la sociedad, quedan en el recuerdo, en el corazón. Sin dudas, Sandro siempre será Sandro, cada quien lo recordará como más le guste, o como pueda, pero no me cabe dudas, que los nenes que nazcan dentro de unos años, van a saber quién fue Sandro, y que las generaciones que lo disfrutaron, dentro de un tiempo, si escuchan alguna canción de él, la vivirán como en las mejores épocas, aunque sea fumando un cigarrillo.
ResponderEliminarPor todo eso y por mucho más, Gracias Gitano, y HASTA SIEMPRE!!
Yaye.-