La historia llegó a su fin
Probablemente no haya nada más triste que ese ritual en el que las personas se juntan para despedir a un ser querido, familiar, amigo, conocido, por que su vida llegó a su fin; por lo general, según marca la tradición católica, los asistentes llevan ofrendas florales, y portan un impoluto luto con vestimentas negras. El llanto, el dolor y la congoja suele aglutinarlos en largos abrazos y en miradas profundas que no necesitan palabras para expresar sentimientos.
Pero mucho más doloroso es cuando ese ritual es unipersonal, no se portan flores, no se viste de luto y la otra persona no se entera.... Cuando por dentro se tiene el pleno convencimiento de que ese otro no existe más, de que todo lazo de unión se rompió y de que esa muerte decretada tiene caracter de irreversible...
La enterré en la propia tumba que ella cabó, y con dolor y angustía tuve que entender que ya no era parte de mi vida (ni yo de la suya) y voy de a poco aceptando como son ahora las cosas.
NaRa
Es re triste y te entiendo
ResponderEliminarCon una "amiga" me pasa lo mismo y es re feo porque ella no lo sospecha pero ya ni siquiera la tecnología ayuda. Yo me cansé de estar por y para ella y ella nunca está es sumamente egoísta!
Espero que te sea leve el luto
Bezitozz Nara
Bue, parece que no soy la única Anto... No creo que eso nos consuele.
ResponderEliminarLa vengo llevando, espero que vos puedas resolverlo también!
Besos
Fuerte.
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